Capítulo 5: La fiesta. Parte II.

...En la entrada los atendió un hombre, y tras saludar a Nick, tachó su nombre en una lista.

-. Pueden pasar. -Dijo el hombre muy amable.

Ambos entraron y tú estabas fascinada con las luces, la decoración tan elegante, el ambiente... todo era perfecto.
El salón era blanco, y la decoración consistía en telas en los techos y paredes, flores en algunos rincones y lámparas que le daban un toque realmente acogedor, en color crema y naranja suave.

Pronto vino un joven a saludar a Nick... pero tú no lo conocías, aunque era famoso.

-. ¡Hey! -Saludó Nick a otro joven. 
-. ¡Hace tiempo no te veía! ¿Cómo va todo? -Decía el chico.

Tú no prestabas demasiada atención, hasta que Nick decidió presentarte.

-. David, ella es ______. -Y dicho esto, el joven te miró sonriente y te saludó.
-. Soy David Henrie. -Se presentó. 
-. Mucho gusto. -Dijiste tú educada. El joven era alto, y no estaba mal, pensaste divertida.

Nick y él charlaron un momento y luego se alejó. 

-. ¿Nos sentamos? -Te propuso Nick señalando su mesa.
-. Está bien. -Sonreíste.

Así que eso hicieron, se sentaron, y otros dos chicos se sentaron luego, al parecer así estaban anotados.
Tú nunca habías ido a una "fiesta" tan formal... todos eran maduros, educados, amables... tan adultos...

-. ¿En qué estás pensando? -Te susurró Nick sonriendo, al notar que estabas en otro mundo.
-. Nada... -Sonreíste. -Es que todo es tan... wow, aquí. -Reíste.
-. Pero te gusta, ¿Verdad? -Preguntó él.
-. Claro que sí... -Dijiste.

Él sonrió levemente y pronto les sirvieron la cena. Los otros dos jovenes no eran famosos, pero Nick los conocía.
Cenaron, rieron, charlaron... nada importante... hasta que notaste que la gente comenzaba a pararse, las luces se atenuaban, y algunos camareros repartían bebidas.

-. ¿Qué viene ahora? -Preguntaste a Nick tomándolo del brazo sin notarlo.
-. Oh, es cuando comienza "el baile", y cuando todo se anima un poco. -Te explicó divertido.
-. Ya veo... -Dijiste. ¿Baile? Ouch.

Sus acompañantes se fueron de la mesa y la música comenzó a sonar... 

-. ¿Vamos a bailar? -Te preguntó Nick no muy convencido.
-. Huh.. Mmm... aún no... -Dijiste tímida.
-. Está bien, podría quedarme toda la noche charlando aquí contigo. -Te dijo sonriente y tú lo miraste a la cara.
-. Qué tierno. -Reíste.
-. ¿La estás pasando bien? -Te preguntó acercándose a tí.
-. Sí... Es una fiesta muy distinta a las que yo suelo ir, pero me gusta. Gracias por invitarme, Nick. -Le dedicaste una sonrisita y te tomaste ambas manos.
-. Me alegro. Gracias a tí por venir. -Y dicho esto hizo algo que no imaginabas... Se acercó y te dio un beso en la mejilla.

Tú te sonrojaste al máximo... fue muy suave, y aunque no es lo que esperabas, estaba muy bien para la ocasión.

Solamente lo miraste y él también te miró fijamente. 

-. Disculpen, ¿Una copa? -Dijo un camarero ofreciéndoles. 
-. Mmm está bien. -Dijo Nick y tomó una, y tú también.
-. ¿Eres de beber alcohol seguido? -Preguntaste divertida.
-. No, no bebo mucho, sólo una copa. -Te respondió él.
-. Claro... yo también. -Sonreíste y bebiste un sorbo.

Luego de un momento notaste que Nick miraba a alguien... no podías ver a quién, pero miraba hacia un costado, y de repente sonrió de la nada.
Volvió a mirarte y preguntó...

-. ¿Quieres bailar ahora? 
-. Claro, está bien. -Respondiste, aunque no creías saber bailar...

Entraron en la pista y la música era alegre... tú no tenías idea de cómo se bailaba eso, y sólo imitaste a los demás... Tenías mucha vergüenza.

-. ¿Te cuento un secreto? Yo jamás bailé esto... -Te dijo él divertido.
-. ¡Yo tampoco! ¡Qué vergüenza! -Dijiste tú riendo.
-. No tengas vergüenza... -Te susurró y sentiste su aliento en tu cuello.

Algunos giraban, otros saltaban, la situación era extraña pero todos se divertían. 
La canción por fin finalizó, y las luces se atenuaron aún más... y sin entender lo que pasaba, ustedes dos se quedaron allí parados... a los pocos segundos, otra canción comenzó, pero esta vez una lenta...

Tú y Nick se miraron, y tú hiciste una mueca.

-. ¿Bailamos, entonces? -Te preguntó, y tú asentiste.

Te tomó de la cintura suavemente, y tú instintivamente pusiste tus manos en sus hombros... te dio un escalofrío y tu corazón se aceleró mucho.
Ambos estaban en silencio, mirando a otro lado... lo que lo hacía incómodo, o eso pensaste, hasta que sus ojos encontraron a los tuyos y supiste que eso era peor, pero así te gustaba más.
Solamente se miraban, tú miraste sus ojos... su boca... su expresión... su rostro completo, él también parecía explorar el tuyo. 

Tú estabas muy nerviosa, intentando descifrar qué pasaría luego... sentiste que las manos de Nick te empujaron hacia él y su cabeza se acomodó suavemente junto a la tuya, y tú cruzaste tus brazos por detrás de su cuello y apoyaste suavemente tu cabeza en su hombro.
Apenas lo creías, pero todo se te hacía tan... mágico...

Se movían muy suavemente, y sentías su corazón, su respiración, su perfume...

Cerraste tus ojos, y jurabas que podrías quedarte ahí para siempre, era un momento de relajación total.

-. _____... -Escuchaste a Nick susurrarte.
-. ¿Mmm? -Dijiste sin abrir los ojos.
-. No vayas a dormirte... -Dijo en tu oído, pero pudiste notar que sonreía.
-. No te preocupes, voy a intentarlo... -Reíste suavemente.

La canción finalizó y las luces se encendieron de nuevo. Nick y tú se separaron lentamente, como si realmente hubieran dormido, o eso pensaste.

-. Wow. Qué buena siesta. -Bromeó él.
-. ¡Osea que yo no podía dormir pero tú sí! -Respondiste sonrojada, y él te guiñó el ojo.
-. ¿Quieres ir afuera un momento? -Te preguntó.
-. Claro... -Aceptaste y salieron.

Era un jardín muy bonito... tenía algunos arbustos y una pequeña fuente, y algunos faroles.

-. ¡Hey! Qué lindo es todo esto. -Dijiste.
-. ¡Lo es! -Dijo él y se sentaron en un banco.

La brisa soplaba suavemente y tú te pasaste las manos por los brazos señalando que tenías frío.

-. ¡Debería haber traído mi abrigo! -Dijiste riendo.
-. Pero no hubiera quedado muy bien con tu vestido... -Dijo él sonriendo y se quitó su saco para dártelo.
-. Oh, gracias Nick... -Te lo pusiste.
-. ¿Mejor ahora? -Te preguntó.
-. Sí, aunque ahora tú vas a tener frío... -Dijiste.
-. No te preocupes por eso... -Sonrió.
-. Oye... también quería agradecerte por ser mi amigo y por todo lo que hiciste por mí a pesar de ser nueva aquí... ni siquiera me conocías... -Le dijiste.
-. Oh, no te preocupes... no hice nada especial... yo también fuí "el nuevo" -Dicho esto soltó una risa. -Y solamente quería ayudar...

Con una sonrisa se miraron y luego Nick volteó y tomó una flor que estaba de decoración, y te la dió.

-. ¡Aww! Muchas gracias Nick... pero... ¡Eso está mal! -Reíste.

-. Lo sé, pero shh, no le digas a nadie... -Te dijo susurrando.
-. Está bien... oye Nick... ¿Qué hora es? -Dijiste.
-. Mmm déjame ver... Oh, ya son las 2:30... -Dijo él desanimado.
-. La noche pasó rápida... -Comentaste.
-. Lo sé, pero estuvo genial. -Sonó como un niño al decir eso.
-. ¡Claro que sí! Entonces... ¿Vamos? -Preguntaste y él asintió.

Cruzaron el salón, Nick se despidió de los demás y salieron.
Te llevó a tu casa y le devolviste el saco.

-. Nos vemos mañana, seguramente. -Dijo él.
-. Claro... que descances. -Lo saludaste y entraste a tu casa.

Al parecer tus padres dormían, y Shane también. Subiste a tu cuarto y te acostaste...